
Hay cosas para las cuales evidentemente no nací, aunque me empeñe en creer que sí, definitivamente no es de tal manera...
Si vislumbro mi porvenir... por ejemplo... (y aunque me empeñe mucho mucho) no veo el amor por ahí haciéndome feliz... extremadamente feliz -como supe sentirme en aquel sueño.-
Veo éxito profesional, amigos por doquier, fiesta y mucho after-office... esas cosas sí.. Pero amor, cero visualización.
El otro día fue casi la peor noche de mi vida. Me sentí tan fatal... me dolía todo, mi alma luchaba por respuestas, por felicidad... y de golpe lo ví. Con tanta claridad que me encandilo.
Mi energía esta fluyendo por lugares demasiado complicados... estoy poniendo fichas en un lugar donde la banca siempre me gana... Y decidí que voy a dejar de apostar.. -ojo, no dije de jugar.. aun tengo algunas puesta por ahí sobre el paño y quiero terminar de gastarlas-.
La historia se repitió con una exactitud increíble. Abismal. Tanto que me impresionó. Y ahora estoy acá. Frente a un tablero, jugando una buena parte de mi caudal a 2 plenos que se me quedaron a la mitad. Dos plenos que me mueven MUCHO el tablero, que me hicieron llorar por muchas razones: de odio, tristeza, amor, culpa....
Sin embargo... voy a probar suerte en otras mesas mientras siga perdiendo en esta. Voy a redirigir mi energía. Quizá si comienzo a ganar... la suerte se extienda mágicamente...
Hoy por hoy.. ¿qué quiero? ¿a quién? No tengo preferencia y es mas que obvio que quiero ganarme todo... No me enojaría mucho si hiciera saltar la banca llevándome todo con 2 plenos...
...(Me siento harta, fría, calculadora y terriblemente forra... que te parece?)...